Este es un verdadero libro de terror. Porque el terror no necesariamente lleva asociada la sangre desde el principio, el terror es sentir lo que estás leyendo como algo que da miedo, algo donde no querrías estar, que no querrías vivir por nada del mundo. Y eso es lo que se siente leyendo esta novela: terror.
El argumento es simple y aparece de vez en cuando en las noticias: Un adolescente lleva a cabo una matanza en un instituto. Por desgracia estamos hartos de oír cosas así.
En esta novela podemos ver cómo es posible que un niño ansiado, de una madre que hace todo por la maternidad, que se desvive, que lo da todo por su hijo, pueda llegar a convertirse en un frío asesino, desconocido incluso para su madre. Desde que nace, nunca cumple nada con lo que su madre soñaba. Es un niño que no para de llorar cuando es bebé, que parece que cada cosa que hace lo hace contra su familia cuando va creciendo. Un niño al que seguimos en su día a día, con su hermana, su padre y la segunda protagonista, su madre.
Hace pensar en muchas cosas: los hijos, la educación, los sentimientos, la genética... sobre todo a las madres, pues nadie querría nunca encontrarse con que su hijo comete una acción de tal calibre.
¿Se nace con la maldad dentro? ¿Es algo que viene de la educación? Son preguntas que cualquiera se termina haciendo cuando lee el libro.
De los libros más recomendables... aunque más duros que he leído.
El argumento es simple y aparece de vez en cuando en las noticias: Un adolescente lleva a cabo una matanza en un instituto. Por desgracia estamos hartos de oír cosas así.
En esta novela podemos ver cómo es posible que un niño ansiado, de una madre que hace todo por la maternidad, que se desvive, que lo da todo por su hijo, pueda llegar a convertirse en un frío asesino, desconocido incluso para su madre. Desde que nace, nunca cumple nada con lo que su madre soñaba. Es un niño que no para de llorar cuando es bebé, que parece que cada cosa que hace lo hace contra su familia cuando va creciendo. Un niño al que seguimos en su día a día, con su hermana, su padre y la segunda protagonista, su madre.
Hace pensar en muchas cosas: los hijos, la educación, los sentimientos, la genética... sobre todo a las madres, pues nadie querría nunca encontrarse con que su hijo comete una acción de tal calibre.
¿Se nace con la maldad dentro? ¿Es algo que viene de la educación? Son preguntas que cualquiera se termina haciendo cuando lee el libro.
De los libros más recomendables... aunque más duros que he leído.
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